La consejera de Derechos Sociales, Luisa Broto Bernúes, y el concejal de Vivienda, Pablo Híjar, han presentado hoy la Oficina Municipal de Vivienda, un recurso que se ocupará de prevenir y atender situaciones de emergencia habitacional en la capital aragonesa. Para lograr este objetivo, este nuevo organismo ofrecerá información, asesoramiento y apoyo a unidades familiares en peligro de perder su vivienda habitual.
Broto ha mostrado su satisfacción con la puesta en marcha de la Oficina Municipal de Vivienda, “una parte fundamental del Plan de Emergencia Social y Ciudadana que el gobierno de Zaragoza en Común marcó para los primeros meses de gobierno”. Además, ha recordado la importancia de que en el Pleno de ayer “se aprobara de forma unánime una modificación de crédito para suplementar con dos millones de euros las ayudas de urgencia”.
Por su parte, Híjar ha destacado que “habrá unos criterios de admisión novedosos, que tendrán en cuenta todas las circunstancias de las familias deudoras de buena fe por causas sobrevenidas que tengan problemas de vivienda”. El edil también ha declarado que “se aprovechará la estructura y experiencia técnica y profesional de la sociedad municipal de Zaragoza Vivienda y la experiencia ya acumulada en el programa de intermediación hipotecaria”. El objetivo, ha apuntado, “es dar una atención de calidad que evite saturaciones mediante un protocolo de colaboración con los centros municipales de los servicios sociales”.
Este nuevo recurso colaborará con las diferentes administraciones y servicios públicos implicados en el ámbito social y jurídico y contará con los agentes sociales implicados, que contribuirán a la difusión del programa y a favorecer el acercamiento de los afectados.
La dotación presupuestaria de la Oficina, que se ubicará en la sede de Zaragoza Vivienda en la calle San Pablo 48, supera los 600.000 euros y la persona encargada de su coordinación será Sergio Castells.
Ejes de la Oficina Municipal de Vivienda
Una de las funciones de la Oficina será la de mediación en deuda hipotecaria. Para ello, responderá a preguntas de los ciudadanos que deseen comprar una vivienda; a aquellas que prevean que no van a poder hacer frente al pago de la misma por una situación económica inestable o que se encuentren en situaciones de reclamación judicial de la deuda hipotecaria.
Por otro lado, también actuará en materia de mediación en arrendamiento de vivienda. En este caso se informará sobre procedimientos derivados de conflictos en la relación arrendaticia o de uso y, especialmente, ante las dificultades planteadas en el pago de la renta. Desde la Oficina, se plantearán medidas correctoras que permitan a la familia mantenerse en la vivienda y cumplir las obligaciones económicas y negociar medidas alternativas. Además, se buscarán vías de mediación en los casos de posibles procedimientos de desahucio, para evitar una demanda judicial.
En este sentido, Híjar ha subrayado que “como Administración local, tenemos un compromiso de oficio, aunque no competencial, con que no se produzcan desalojos forzosos sin alternativa habitacional en nuestra ciudad, es decir, superar esa imagen que hemos estado viendo durante estos últimos años de familias desfilando con las comisiones judiciales acompañadas de Policía fuera de sus casas de manera violenta”.
La Oficina Municipal de Vivienda integrará también el Punto de asesoría energética donde se ofrece atención especializada en materia de energía.