Durante los días 17 y 18 de octubre, Pedro Santisteve se encuentra en Bruselas para participar en el encuentro de ciudades solidarias con el derecho de asilo y los refugiados “Solidacities”.

El objetivo del encuentro, organizado por el Grupo Parlamentario Europeo de la Izquierda Unitaria / Izquierda Verde Nórdica, es coordinar el diálogo entre las ciudades europeas que organizan la recepción y atención de personas desplazadas, así como las organizaciones y la sociedad civil implicada en el tema.

Más de una veintena de ciudades como París, Lesbos, Estocolmo, Madrid, Barcelona, Pamplona, o Valencia, representadas por sus alcaldes y alcaldesas, nos damos cita, para poner en común las iniciativas que hemos llevado a cabo en materia de política de asilo y atención a las personas desplazadas.

En Aragón, hay actualmente 153 personas en el programa de Acogida e Integración, de las cuales 147 residen en Zaragoza. Una cifra muy alejada del compromiso adquirido por el Estado español para acoger cerca de 18000 personas desplazadas, que supone una vergüenza que lamentaremos en el futuro.

Desde que el 2 de octubre, el pleno del ayuntamiento votara por unanimidad adherirse a la red estatal de ciudades de acogida de refugiados, desde el Ayuntamiento trabajamos en varias líneas de actuación.

En primer lugar, participando en el diseño del Protocolo de Acogida de personas de protección internacional en Aragón, basado en tres pilares fundamentales: Acogida, Integración y autonomía.

Además, el Ayuntamiento de Zaragoza ha mantenido una fluida colaboración con las entidades responsables de la acogida e inserción de las personas que llegan a nuestro país: Cruz Roja, CEPAIM y ACCEM, poniendo a disposición alojamientos dignos. Concretamente el Ayuntamiento de Zaragoza ha firmado un convenio con ACCEM para poner a disposición viviendas para 18 personas a través de zaragoza Vivienda.

Hemos organizado una mesa permanente de recursos propios del ayuntamiento (Albergue, Casa de las Culturas, Zaragoza Vivienda, Cooperación al Desarrollo y Servicios sociales comunitarios) preparados para actuar en el momento que sea oportuno, ante la llegada de refugiados.

También se ha destinado una partida -aprobada por unanimidad por todos los grupos municipales- de 200.000 euros del presupuesto para afrontar las contingencias derivadas. Ante el incumplimiento del compromiso por parte de España de acoger a 18.000 personas refugiadas, el ayuntamiento decidió una modificación presupuestaria para destinar este dinero a proyectos ubicados en países con campos de refugiados cerca de Siria e Irak, a Caritas, UNRWA y Acción contra el Hambre.

Y de este modo, el compromiso con las personas refugiadas se verá igualmente reflejada en la planificación de las políticas sociales en 2017.

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