Miembros de la Corporación,

Resto de autoridades,

Representantes de la sociedad organizada,

Señoras y señores:

Lo más revolucionario que una persona puede hacer es decir siempre en voz alta lo que realmente está ocurriendo”.

Quiero comenzar este discurso citando a Rosa Luxemburgo, una de las más destacadas figuras del feminismo, precisamente este año 2018, que pasará a la historia, sin lugar a dudas, por ser el “Año de las Mujeres”.

Un año de esperanza, de movilizaciones y de una larga lucha históricamente invisibilizada. Un año que supone un rayo de luz entre tanta zozobra, fruto de un clima político completamente enrarecido,  y que debería preocuparnos a todos, porque es el caldo de cultivo ideal para un fascismo en alza que fomenta el odio hacia lo diferente, hacia los sectores más vulnerables de nuestra sociedad.

Hoy algunos querrán convertir mi comparecencia en este Salón de Plenos en el balance de la corporación que presido.

Por ello no está de más recordar los motivos  que nos trajeron a las instituciones, a ciudadanos comprometidos e ilusionados,  que durante estos cuatro años hemos gobernado los llamados “Ayuntamientos del Cambio”. ¿ Qué nos llevó a lanzarnos con responsabilidad a esta tarea?

En primer lugar retomar el liderazgo político en el campo de la economía urbana; frente a los fatídicos resultados del estallido de la burbuja inmobiliaria, el dispendio de caudales públicos en la contratación de grandes obras y servicios,  así como la lacra de la corrupción y sus consecuencias por todos conocidas. En segundo lugar situar el rescate social, el de las personas golpeadas por la crisis en el centro de las prioridades de nuestra acción de gobierno, propiciando  la inclusión y la reconstrucción de derechos sociales básicos.  Como tercer elemento desarrollar una agenda de transformaciones sostenibles que hicieran frente a la vulnerabilidad de las ciudades ante el fenómeno del  cambio climático, poniendo en el centro del quehacer político la salud y por tanto la calidad de vida de nuestra ciudadanía. Por último avanzar en el desarrollo de una democracia participativa que caminara hacia una nueva  Gobernanza Urbana, con el objetivo de ampliar  las oportunidades del control público, en el uso del espacio público-comunitario.

Fue hace cuatro años cuando empezamos a configurar el programa con el que aspirabamos a cambiar las formas de gobernanza de esta ciudad.

Hoy haré balance como es natural, de lo hecho, conseguido o puesto en marcha en los casi tres años y medio que llevamos al frente del Gobierno, siendo consciente de que estas líneas estratégicas se han podido aplicar con distinta intensidad, éxito o capacidad de impacto.

Pero de lo que estamos convencidos es que ese conjunto de medidas adoptadas y que someto a la consideración de sus señorías en este debate, conllevan en sí mismas el germen de ese cambio estratégico en las direcciones antes aludidas. Lo iniciamos en junio de 2015 y va a requerir de más tiempo para que esté plenamente concluido. Lógicamente aspiramos a revalidar la confianza de los vecinos y vecinas de nuestra ciudad para poder culminar la tarea. Espero, eso sí, que ello suceda en un ambiente más propicio, para avanzar en la dirección correcta de implementar políticas y medidas de transformación que mejoren la vida diaria de la ciudadanía.

Sé que no es muy común que los responsables políticos pongamos tanto énfasis en el cumplimiento del programa electoral con el que concurrimos a las elecciones. Pero no podemos olvidar que el bipartidismo ha entendido dichos programas más como mera propaganda que como un documento de trabajo y guía para una efectiva rendición de cuentas. En nuestro caso sentimos un especial orgullo al constatar, que hemos cumplido de manera holgada con la mayor parte de las propuestas incluídas tras el proceso abierto y participativo que dio lugar a nuestro programa de Zaragoza en Común.

Evidentemente un gobierno en minoría como el que presido, sustentado únicamente por 9 concejales de 31, situación por cierto similar a la que ocurre en otras instituciones como el Gobierno de Aragón o el Gobierno de España, no tiene la capacidad de desarrollar todas las políticas que desearía. Mi propio discurso de investidura ya incluyó un buen número de propuestas, trasladadas por los otros dos grupos de la izquierda, que hicieron posible mi nombramiento como Alcalde. Y hoy, buena parte de ellas, son ya una realidad .

Al igual que ocurrió en el mandato corporativo anterior, no ha sido posible suscribir un acuerdo de gobernabilidad de la institución entre las fuerzas de la izquierda de este Salón de Plenos. 

Esa es, posiblemente, la única similitud entre ambas corporaciones. Asumimos que gobiernos anteriores pudieran tener cierta tranquilidad y estabilidad a la hora de poder llevar a cabo sus propuestas, pero no es menos cierto que la irrupción del municipalismo en el Gobierno de la institución supone, de facto, una ruptura con esa continuidad. De ahí que haya sido particularmente difícil contar con la complicidad de las demás fuerzas de izquierdas; tal vez su incomprensión, ante este cambio de gobernanza y escenario político, es lo que les ha llevado a ser, en muchas ocasiones, más beligerantes, incluso, con las propuestas del gobierno, que la bancada de la derecha.

A pesar de todo, la visión que tenemos en el gobierno es que la batalla dialéctica, lo que los “modernos” llaman el relato, se ha inclinado del lado de quienes apostamos por políticas progresistas y transformadoras para nuestra ciudad.

Hoy ya no se cuestionan los presupuestos participativos en sí, sino el cómo se hacen. Algo similar ocurre con el freno a las políticas urbanísticas expansivas, en las que llevábamos instalados casi una década. Nadie plantea ya nuevos desarrollos urbanos, porque se está pensando en cómo ofrecer actuaciones que permitan una mayor calidad de vida en la ciudad consolidada.

Podría poner innumerables ejemplos de cómo ha triunfado una visión progresista, transformadora, inconformista, audaz, en ocasiones, transgresora, de la gestión institucional. Frente a ello han sido derrotadas de manera sistemática las posiciones que aspiraban a paralizar la acción de gobierno, a volver al pasado, a dar pasos atrás, instalando el pesimismo en la opinión pública, en definitiva, a hacer mella en nuestro estado de ánimo y generar desesperanza y resignación.  No lo han conseguido en absoluto.

No ha sido fácil desde luego. Quien más quien menos ha tenido sus momentos de flaqueza, que han podido ser superados gracias al apoyo mutuo que nos hemos prestado unos a otros.  Todo el equipo del gobierno, no tengan dudas, seguimos unidos como el primer día.

Este mandato se ha caracterizado, por tanto, por la lucha entre dos modelos de ciudad completamente contrapuestos. El primero mira hacia delante, con optimismo, ilusión, vocación de cambio y transformación. Aspira a situar a Zaragoza en el lugar que se merece, partiendo de posiciones progresistas y de izquierdas, y coloca a las personas en el centro de su acción política  aspirando  a que  nadie se quede atrás. El otro es todo lo contrario, una continua vuelta al pasado. La pérdida de calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas. Nuestra decadencia como metrópoli al alejarnos de las posiciones más vanguardistas de nuestro tiempo. Lo cual afectaría, en definitiva, a nuestra cohesión social y, por ende, a nuestro modelo de convivencia pacífica al que aspiramos como pueblo.

Esta lucha ha estado presente todo el mandato. Y no sólo me refiero a lo acontecido en este Salón de Plenos, sino, especialmente, a lo que ha ocurrido ahí fuera, en la ciudad de verdad. Porque lo que aquí ocurre no deja de ser una mala representación teatral de la liturgia, un tanto trasnochada, en lo que se ha convertido la política institucional en nuestro país.

La batalla no ha sido sólo contra los grupos políticos que representan ese modelo de ciudad de vuelta al pasado. Bien al contrario, la pelea más cruenta ha sido contra quienes “de verdad mandan” en esta ciudad. Poderes fácticos, económicos, lobbies de presión y grupos de interés tan acostumbrados a que los representantes públicos coman de su mano.

Se nos acusa con vehemencia de gobernar únicamente para quienes nos votaron tergiversando, para variar, nuestras palabras. Salvador Allende dijo en una ocasión “Yo no soy el presidente de todos los chilenos, no soy hipócrita”. Puesto en su boca seguro que es mucho más fácil para todos entender de qué estamos hablando.

Tenemos claro a quienes nos debemos: a la gran mayoría de nuestros vecinos y vecinas,  que no tienen la fortuna de contar con apellidos ilustres que supuestamente les han permitido acceder a quienes ostentaban el poder. Esa fue la razón de nuestra renuncia a los privilegios y de que nos bajaramos el sueldo nada más acceder a la institución; no solo para alejar cualquier tentación de engrosar esas élites, sino por nuestro deseo de seguir siendo gente austera y sencilla en sus modos de vida.

Esta y no otra ha sido la guía de nuestra acción de gobierno. La lógica que nos ha llevado a poner en marcha un ingente número de políticas, planes, acciones, estrategias, y  reformas en beneficio de la mayoría social.

Paso a relatar a continuación las que consideramos más relevantes, importantes, vanguardistas o transformadoras de todas ellas.

MODELO DE CIUDAD

Nos hemos convertido en una de las grandes capitales españolas con mejores índices de calidad de vida. Así lo ha valorado recientemente el Observatorio de la Sostenibilidad en una radiografía realizada a partir de 59 indicadores distribuidos en cuatro grandes bloques: económico, social, ambiental, transparencia y cooperación. Según este organismo, Zaragoza se encuentra en el sexto lugar, como capital que cumple y avanza hacia los objetivos de Desarrollo Sostenible y la Nueva Agenda Urbana Europea.

Sostenibilidad medioambiental

Podemos decir, sin duda alguna, que en esta legislatura Zaragoza se ha situado a la cabeza en las estrategias de lucha contra el cambio climático, la mejora de la calidad del aire y la salud. La Estrategia de Cambio Climático, Calidad del Aire y Salud (ECAZ 3.0) se aprobó antes del verano, con el objetivo de renovar acuerdos a largo plazo y prepararnos para nuevos desafíos globales:

Reducir las emisiones de dióxido de Carbono en un 40%, los residuos domésticos que llegan al vertedero en un 50% y la concentración de dióxido de nitrógeno en un 60% respecto a los niveles de 2005,  son las metas para el año 2030.  Y para ello hemos desplegado una estrategia en torno al diseño y la movilidad urbana, la industria y los servicios públicos. ¿En qué basamos esta estrategia? En el uso de energías renovables para el consumo y la movilidad, la alimentación sostenible, la gestión sostenible del agua, y el aprovechamiento de los residuos como recursos. Estas medidas ya están dando los primeros resultados.

La incansable labor de la Concejala Teresa Artigas ha hecho posible que estemos avanzando rápidamente en la transición energética de la propia institución.. La electricidad que consume el Ayuntamiento de Zaragoza es de origen 100% renovable desde noviembre de 2016. Estamos preparados para llevar a cabo las primeras pruebas para comprar directamente al “pool” la electricidad que consume el Consistorio. Se han instalado paneles fotovoltaicos en edificios municipales y realizado inversiones y mejoras que nos han permitido ahorrar más de cinco  millones de euros cada año en el consumo. Y ya existe una incipiente red de electrolineras, preparadas para recibir vehículos eléctricos.

Con todas estas medidas, donde unimos la innovación, la ciencia, la tecnología, la ecología y la sostenibilidad, Zaragoza está aplicando ya un nuevo modelo de cambio energético. Nuestro espacio público está preparado para ser uno de los más sostenibles de las ciudades del sur de Europa.

En materia de movilidad, nuestra actuación ha ido en consonancia con el contenido de la propuesta de Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) que ya se está aplicando en nuestra ciudad y se extenderá hasta 2027. Seguimos tendiendo la mano a los grupos de la izquierda para que su aprobación se realice con el mayor de los consensos posibles, tal y como les hemos expresado repetidamente, en público y en privado.

Dicho plan incluye un apartado muy ambicioso dedicado a infraestructuras y proyectos. Sin embargo su virtualidad deriva de estar enfocado hacia las personas y la salud. El plan está diseñado en torno a 4 grandes ideas.

En primer lugar,  organizar la ciudad en torno a Zonas 30, residenciales y supermanzanas. En segundo lugar, la apuesta  por un transporte público limpio y eficiente, para lo que se reserva el 71 % del presupuesto total del plan. En este apartado destaca la apuesta por los medios de transporte de alta capacidad como la línea 2 del tranvía o la línea 3 Torrero-Santa Isabel, que podrá llevarse a cabo con bus biarticulado eléctrico o tranvía, indistintamente. En tercer lugar, juegan un papel primordial las medidas destinadas al impulso a los vehículos limpios, en especial a los eléctricos, y la aplicación de medidas restrictivas para su circulación  a los más contaminantes.

En estos tres años y medio hemos aumentado en 30 millones la inversión en mejoras para el transporte público: los autobuses urbanos ya no superan la media de edad de seis años, a finales del año que viene habrá más de setenta buses híbridos y eléctricos circulando por la ciudad, un 25% de la flota. Estamos apoyando también la transición energética en el conjunto de los taxis de Zaragoza: el próximo año tendremos treinta y cuatro eléctricos circulando por nuestras calles. Somos ya la primera ciudad española en incorporar estos modelos.

Se ha renovado el parque móvil municipal con vehículos 100% eléctricos. ¿Saben cuánto dióxido de carbono dejamos de emitir a nuestra atmósfera solo con esta medida? 22 toneladas cada año.

¿Cuánta gente utiliza ya la bicicleta como elemento fundamental de movilidad? El impulso y ampliación de la red vial ciclista no ha sido exclusivamente una política de este gobierno. La propia ciudadanía ha decidido, a través de los presupuestos participativos, la ejecución de cerca de una decena de tramos y carriles.

Zaragoza se ha convertido en una de las ciudades de referencia en España en la implantación de vehículos de movilidad compartida, tanto en moto eléctrica, como en bici o en vehículos de movilidad personal, los patinetes.

Hemos aprobado esta misma semana en gobierno el proceso de consulta pública previa a la aprobación del proyecto de la ordenanza para la circulación de vehículos de movilidad personal, con el objetivo de garantizar un buen servicio y de optimizar la ocupación del espacio público.

Esta legislatura hemos dado un impulso al transporte público metropolitano, duplicando el presupuesto que dedicamos al Consorcio y, sobre todo, con el desarrollo innovador de la Tarjeta Lazo. Este dispositivo integra los autobuses del entorno metropolitano, la línea directa al aeropuerto, los buses urbanos, el tranvía, los cercanías, la bici, y los parquímetros de la ciudad. La unión de la tecnología y la movilidad, con un servicio público accesible, está consiguiendo que los vecinos y vecinas utilicen mucho más el transporte público y vengan menos en coche desde los municipios del entorno de Zaragoza.

Con todas estas innovaciones: donde vinculamos las últimas tecnologías, las energías limpias, los usos más sostenibles en el transporte público…, estamos consiguiendo una Zaragoza más ecológica, menos contaminada, más verde……Ah!!! y no quiero olvidarme en esta apuesta por la sostenibilidad de los residuos y de los buenos resultados de la recogida selectiva de materia orgánica. Están en marcha dos programas piloto en la zona centro de la ciudad y en Actur que nos han permitido recoger doscientos cincuenta mil  kilos de residuos orgánicos desde el pasado mes de julio . Es un éxito de participación y de concienciación ciudadana, conseguida a través de las campañas de sensibilización y comunicación que hemos realizado con Agentes Comunitarios: personas que, tras una formación especial, han trabajado durante varios meses, informando de la nueva manera de tratar los residuos en los domicilios, y cuyo perfil laboral han proporcionado los Servicios Sociales municipales. Este tipo de campañas se han aplicado a otros ámbitos como la limpieza de excrementos de perros en las calles de la ciudad, o la recogida de envases.

Esta reducción en los consumos, la estrategia de consumo responsable, la eficacia en la reutilización de los residuos, y la incorporación del enfoque de la salud es, precisamente, el elemento diferenciador de la ECAZ 3.0.

Con todas estas medidas y el paraguas de esta estrategia lograremos dejar de emitir más de setecientas cincuenta mil toneladas de dióxido de carbono cada año. Un dato importante si tenemos en cuenta el último informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente, que nos dice que la mala calidad del aire en las ciudades es ya la principal causa de muerte prematura.

En línea con el Plan Director de la Infraestructura Verde de Zaragoza, la semana pasada, aprovechando la celebración del Seminario Internacional “El agua y los ecosistemas fluviales en la ciudad”,  lanzamos el proceso para dotarnos de un contrato de río, tal y como se ha llevado a cabo en otros países de nuestro entorno, como Francia, y también en lugares tan próximos como la Comarca del Matarraña.  Se trata, dando cumplimiento a la resolución aprobada por unanimidad de todos los grupos municipales en este mismo debate hace justo un año, de iniciar un proceso de reflexión colectiva que nos diga cómo debemos relacionarnos, como ciudad, con nuestros ríos, sus cauces y riberas.

Seguimos peleando por que el saneamiento y la depuración de nuestras aguas vuelva a ser un servicio público municipal. Creemos que la gestión del agua ha de ser 100% pública y nuestro compromiso al respecto es total. Desde que retomamos el control de Ecociudad hemos aprobado el Plan Director del Ciclo Integral del Agua Urbano de Zaragoza en el cual se prevé duplicar los recursos destinados a inversión. Hemos reducido también un 9% las externalizaciones a través de la puesta en marcha de un plan de empleo en la sociedad, lo cual se complementa con medidas que apuestan por una mayor transparencia en la gestión.

Nos hemos chocado, eso sí, con un muro que a día de hoy no hemos conseguido superar:  el ICA. A pesar de los innumerables intentos para llegar a una solución negociada con el Gobierno de Aragón en  la aplicación de este impuesto en nuestra ciudad, ha sido completamente imposible.  Tengo que volver a decir alto y claro que  seguimos dispuestos a afrontar un diálogo sincero sobre este asunto, para encontrara una solución que no se base en la imposición o el chantaje. Como punto de partida, pedimos una cosa bien sencilla: que el Gobierno del presidente Lambán nos traslade su propuesta, algo que a día de hoy no ha hecho.

Aprovecho la presencia de miembros de su gobierno en esta sala para solicitarlo una vez más. También solicitamos que el Gobierno de Aragón escuche a los colectivos críticos con este impuesto y sus propuestas de modificación: se trata de propuestas serias y sensatas, en línea con lo que cualquiera podría esperar de una comunidad, preocupada por resolver sus problemas en materia de contaminación desde una perspectiva de cuidado de sus masas de agua y solidaridad interterritorial.

Sostenibilidad social

Ya he dicho al principio de mi discurso que vinimos a la institución con la prioridad de mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas, y en especial de los más vulnerables. Hemos puesto en el centro de nuestras políticas la garantía de nuevos derechos humanos emergentes: el derecho a respirar un aire más limpio, reduciendo la contaminación, a una mejor alimentación, pensando en la soberanía alimentaria, a unos hábitos de vida más activos, movilidad peatonal.

De esto se trata cuando hablamos de garantizar el cumplimiento de los derechos sociales.

Zaragoza es la segunda gran capital española con mayor inversión social por habitante, algo que nos ha reconocido dos años consecutivos la asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales de España. El aumento de las cuantías presupuestarias ha sido notable: un 40% más de inversión que nos ha permitido poner en marcha importantes planes y mejoras.

A nuestra Consejera y Vice-alcaldesa Luisa Broto, y su equipo, le debemos los excelentes resultados obtenidos en este área.

Cerca de 40 nuevos profesionales se han incorporado a los Servicios Sociales; la gestión de las prestaciones y ayudas de urgencia ha mejorado notablemente, garantizando con suficiencia la cobertura de necesidades básicas de la población; la organización de los centros municipales de servicios sociales es más eficaz, lo que ha redundado en la calidad de las intervenciones; y hemos puesto en marcha la Oficina de Atención a la Ciudadanía y Buenas Prácticas, que nos permite estar más cerca de quienes atendemos. Un ejemplo de esta buena gestión, en la organización de los servicios, ha sido la apertura de un nuevo centro en Delicias, en la c/ VIcente Berdusan,  que se llamará “Alfredo Pérez Palacios” , en homenaje al veterano funcionario tan querido en nuestra ciudad. Procederemos a su inauguración el próximo 19 de diciembre.

Se ha actuado en diecisiete centros municipales de Servicios Sociales, con más de seis millones de euros de inversión. De cara a los próximos dos años, tenemos previsto invertir más de cinco millones y medio para mejorar varios centros más, incluida la reforma del Albergue y Casa Amparo.

Esta misma semana, hemos recogido el premio de Unicef como Ciudad Amiga de la Infancia y la Adolescencia. Se debe este título al trabajo transversal de todas las áreas del Ayuntamiento y sus empleados y empleadas públicas, a la colaboración de una treintena de entidades de la ciudad y al apoyo unánime de todos los Grupos Municipales.

Una pieza importante para este reconocimiento fue la aprobación del Plan de Lucha Contra la Pobreza Infantil el 22 de diciembre del pasado año. Este documento contempla 150 medidas en las que ya estamos trabajando:  como la creación de Espacios Familiares Comunitarios; el desarrollo de una Red de iniciativas comunitarias para el apoyo y el refuerzo escolar para  prevenir el fracaso y el abandono; o las ayudas y becas para recursos terapéuticos, actividades de apoyo educativo, extraescolares, culturales y deportivas.

Luego volveré a detenerme en esta idea de trabajar en comunidad, tejiendo redes, una filosofía que se extiende a la mayoría de los ámbitos de nuestra acción de gobierno.

La inversión de la pirámide poblacional, es decir, el envejecimiento de nuestra sociedad, obliga a prestar una especial atención a nuestra gente joven. Facilitando espacios de encuentro, fomentando su participación, propiciando que tengan una mayor relevancia política dado que el futuro les corresponde a ellos y deben  comenzar a gobernarlo cuanto antes.  De ahí las más de mil doscientas propuestas que han conformado el Plan Joven de Zaragoza como una herramienta para poner en marcha políticas de empleo, vivienda, cultura, sexualidad o deporte, incorporando la perspectiva de género en todas estas acciones.

Si miramos al otro extremo de la pirámide, a las personas mayores, el trabajo desde las políticas públicas debe sustentarse en dos direcciones: facilitar medios y oportunidades para el envejecimiento activo y la garantía de una mayor calidad de vida de las personas mayores en sus hogares.

En esa línea, se ha hecho un importante refuerzo presupuestario de los servicios de ayuda a domicilio y teleasistencia, tanto para las personas que lo reciben de forma preventiva, como para las personas dependientes de grado 1 con el derecho reconocido. Con la campaña “los detectores salvan vidas” ayudamos a que se sientan más seguras en casa. Pero de la misma manera, debemos propiciar las relaciones personales y la actividad deportiva y saludable, y eso se está consiguiendo a través de la Red de Centros de Mayores, ampliando las plazas y actividades. Los programas “nos gusta hablar” y “en bici sin edad” están teniendo un éxito arrollador. También muy demandado está siendo el nuevo servicio sociosanitario de atención a emergencias, puesto en marcha en colaboración con la Policía Local, que ha realizado ya más de trescientas intervenciones en medio año.

Este servicio de atención ciudadana con la Policía Local no es el único ejemplo que identificará el nuevo modelo de seguridad para Zaragoza.

Un modelo basado en una policía de proximidad, que ponga énfasis en la prevención y la resolución de conflictos dentro de un trabajo comunitario. Esos serán los ejes de actuación de las dos nuevas unidades del cuerpo: la Unidad de Mediación, que atenderá cualquier conflicto en la convivencia ciudadana, y la Unidad de Refuerzo Flexible, que centrará su trabajo en apoyar la actuación del resto de Unidades. El nuevo modelo parte de una mejora en la formación de los agentes, especialmente en la atención en casos de violencia de género,  y contará también con el Observatorio de la Seguridad. En esta línea, en los próximos meses, presentaremos la sección ciclista, que contará con bicicletas eléctricas para desempeñar su labor.

La vivienda como derecho

Desde que llegué a la Alcaldía, no me he quitado de la cabeza cómo implementar Derechos Sociales, que al carecer de las debidas garantías constitucionales para su cumplimiento, quedan al albur de los compromisos del gobierno de turno. Es el caso del derecho a una vivienda digna que tiene cualquier persona. Según Comisiones Obreras en el periodo 2009 a 2014 los recortes en políticas de vivienda del gobierno del PP ascendieron a casi 7.000 millones de euros. Esto ha impedido cualquier tipo de colaboración con los Ayuntamientos. Sin embargo, les voy a resumir lo que hemos conseguido, y lo que queremos hacer, también, con la ayuda del Banco Europeo de Inversiones.

En política de alquiler – la nueva burbuja de la vivienda en España-, hemos actuado en varios frentes: las viviendas de alquiler social, las ayudas al pago de alquiler, la captación de vivienda vacía y la rehabilitación energética.

Desde 2015 hemos adjudicado más vivienda social que en los doce años anteriores: setecientas en esta legislatura frente a las quinientas setenta y tres de las tres corporaciones anteriores. Un tercio de ellas han sido para dar respuesta a procedimientos judiciales y evitar desahucios. Las ayudas directas al alquiler han llegado a una media de ochocientas noventa familias al mes. Y con el programa ‘Alegra tu vivienda’ para captar viviendas vacías, se han conseguido más de cuatrocientos pisos para incluirlos en la bolsa de alquiler social. Mérito que debemos reconocerle al Concejal Pablo Hijar.

Otra línea de trabajo ha sido la política de rehabilitación, con la que intentamos mejorar la accesibilidad y la eficiencia energética de viviendas y edificios, disminuyendo su consumo de calefacción. Con estas medidas tratamos de responder a las necesidades de las personas con rentas más bajas, consiguiendo, en muchos casos, paliar situaciones de pobreza energética. Cosas tan sencillas como cambiar ventanas, instalar rampas, ascensores o platos de ducha han mejorado la vida de muchas personas. Esta inversión, de más de siete millones y medio de euros ha creado ciento treinta y ocho empleos directos

Estas inversiones continuarán aumentando con el ambicioso Plan de Inversiones en Vivienda, para el que contamos con la financiación del Banco Europeo, que también ha apoyado planes en la Comunidad Foral de Navarra y el Ayuntamiento de Barcelona. Sin embargo, nuestro plan va más allá que el de nuestros vecinos, porque además de contemplar la construcción de más de trescientas viviendas de alquiler incluye también la rehabilitación energética de ochocientos cuarenta y dos inmuebles – cerca del cincuenta por ciento del parque de vivienda social del Ayuntamiento – con una inversión de setenta y dos millones de euros que generará no menos de  1.300 puestos de trabajo. El Comité de Dirección del Banco Europeo de Inversiones ya ha procedido a aprobar el pasado 6 de noviembre la operación de préstamo para la financiación de este proyecto, por lo que tan solo resta su aprobación por parte de sus señorías.

El trabajo comunitario en el entorno de la vivienda municipal también nos permite, con programas de intervención familiar en los barrios del Actur, Parque Goya y Arrabal, apoyar a menores que se encuentran bajo condiciones de vulnerabilidad múltiple. Más de mil familias han participado ya en este programa.

Igualdad y feminismo

Resarcir a las mujeres de la posición subordinada a la que han sido arrojadas, implica luchar tambien por esta ciudad socialmente sostenible. Una Zaragoza en Igualdad,  significa trabajar para que ésta sea una ciudad feminista.

El feminismo, como nos suele recordar nuestra Concejala responsable, Arantza Gracia, no puede ser un lema al calor de los tiempos. Debe traducirse en políticas concretas. Incorporar el enfoque de género en las políticas públicas significa reconocer, en primer lugar, que estas no son neutras. Y que por tanto pueden ser políticas discriminatorias, correctoras o transformadoras. Uno de nuestros empeños ha sido posibilitar que el género esté presente en todas las políticas municipales.

Para ello nos hemos servido de varias herramientas, la más importante, el nuevo Plan de Igualdad 2018-2021.  Elaborado con una amplia participación social, contempla doscientas treinta y cinco medidas y ocho líneas estratégicas que van desde la comunicación hasta la diversidad afectiva pasando por la lucha contra la violencia y a favor de la corresponsabilidad.

En España este año se han producido, hasta hoy 92 feminicidios y ocho niñas y dos niños han sido asesinados por la violencia machista. Por eso, a nivel institucional, hemos creado el protocolo de duelo por asesinato machista en nuestra ciudad y el protocolo ante una agresión sexual durante las fiestas, que desgraciadamente tuvimos que aplicar varias veces durante estos últimos Pilares. También, se ha creado un “Procedimiento de Coordinación para la Prevención y Erradicación de la Violencia de Género en la ciudad de Zaragoza” , en coordinación con el Gobierno de Aragón. Además hemos ampliado la oferta habitacional a mujeres en situación de violencia y continuamos con las campañas de sensibilización como el  “No es no” .

Este año se han organizado las primeras Jornadas Internacionales Feministas, que nos han colocado en el mapa de la lucha por la igualdad en nuestro país. Un encuentro que ha supuesto un rotundo éxito a la hora de  reflexionar, ampliar nuestro campo de análisis y  canalizar respuestas para luchar por la igualdad.

El trabajo para visibilizar a la mujer es transversal como la mayoría de nuestras politicas. En las programaciones culturales en teatros,  centros cívicos y de mayores; en las bibliotecas (mediante los fondos de diversidad); con el apoyo al deporte femenino (a través de la creación de equipos de fútbol y el fomento de los deportes minoritarios); e incluso con el turismo (con proyectos como la Zaragoza de las Mujeres, que incluye rutas con perspectiva de género.

Ante tal reto, es evidente que los hombres debemos dejarnos contagiar y ser conscientes de que es necesario hacer propia la lucha contra las discriminaciones, como factor de crecimiento personal, de crecimiento en dignidad y autoestima.

Empleo

¿Cómo dinamizamos el empleo desde la administración local? Pocas competencias tienen los Ayuntamientos que no sean las de favorecer las condiciones para atraer inversiones innovadoras, retener el talento local y ayudar a las pequeñas y medianas empresas. Sin embargo, donde sí podemos actuar de forma directa es en la creación de empleo público.

Tras años de recortes, gracias a la labor del consejero Alberto Cubero, se ha revertido la enorme destrucción de empleo y la plantilla municipal ha aumentado en doscientos puestos de trabajo. La mitad de ellos se han generado en el área de Derechos Sociales, lo que revela la prioridad de las políticas de este Gobierno. Es nuestra intención continuar en la línea de renovar la plantilla municipal que desde el 2009 ha perdido más de seiscientas plazas.

En el sector empresarial,  impulsamos las actividades más cercanas a la ciudadanía que ayudan a hacer barrio. Y eso pasa, indudablemente, por el comercio local, los mercados de proximidad y dignificar la venta ambulante.

Actualmente, hay siete mil doscientos  pequeños comercios en la ciudad, en los que trabajan de forma directa unas catorce mil personas. Se calcula que la actividad económica asociada a este comercio -transporte, limpieza, suministros- supone al menos otros catorce mil puestos de trabajo indirectos. Este sector ha sufrido con especial crudeza los efectos de la crisis: cerca de mil cuatrocientos negocios cerraron la persiana en Zaragoza entre 2010 y 2015. Ha sido decisión de este gobierno recuperar el tejido comercial en los barrios, mediante el Plan de Apoyo al Comercio de Proximidad: fomentando el consumo sostenible y mediante las ayudas para mejorar infraestructuras e impulsar iniciativas que pongan en valor locales vacíos con actividades atractivas para los consumidores.

Anuncié el año pasado, en esta misma sesión, el Plan de Mercados Siglo XXI, que contemplaba la construcción de cinco mercados municipales en los próximos diez años, con el fin de extender a las principales zonas de la ciudad el servicio de mercado público municipal.

Además de la reforma del Mercado Central y la instalación del mercado provisional, ya hemos dado los primeros pasos para el desarrollo de un nuevo mercado público en Parque Venecia. Continuamos trabajando para proyectar estas instalaciones que reactivan la economía, reducen la huella ecológica e invierten la tendencia del consumo en el extrarradio, favoreciendo el tejido social en la ciudad consolidada.

Un Urbanismo pensado para las personas

Me va a producir una gran satisfacción, no solo como Alcalde, también como vecino de El Gancho, ver terminada la obra de reforma del Mercado Central. Pero lo más importante es que esta ilusión es compartida con una gran mayoría de los vecinos y vecinas de esta ciudad. Fue una apuesta arriesgada, que combinó el mantenimiento de los puestos en un mercado provisional con la rehabilitación de uno de los edificios más importantes de nuestro patrimonio. Y tengo que decir que lo vamos a conseguir.

Recuperar el patrimonio de la ciudad, que los vecinos y vecinas encuentren la manera de dar uso a edificios que forman parte de nuestra historia para que sigan formando parte de nuestras vidas, es otro de nuestros objetivos en el diseño de la ciudad. El Mercado Central no es el único edificio emblemático que estamos rehabilitando. Fíjense: la Harinera de San José, que recuperó la anterior corporación, es un centro de atractivo cultural de primera magnitud en estos momentos. La Imprenta Blasco ya tiene proyecto para nuevos usos. Los Baños Judíos se han desbloqueado tras quince años cerrados al público. La Harinera de Casetas se ha salvado de la piqueta. La Torre Ramona también.  El reto es integrarla ahora en el entorno para ser un equipamiento utilizado por los vecinos y vecinas de las Fuentes. Y la Nave de la Ternera del Antiguo Matadero, que albergará un centro de formación empresarial. Los Depósitos de Pignatelli,la Antigua Casa del Director de La Azucarera, la Antigua Capilla del Psiquiátrico de Delicias, las mejoras interiores y exteriores en el Teatro Principal, el patio del Luis Buñuel, la reforma del Túnel de Oliver...

Insisto: Apostar por la recuperación de nuestro patrimonio es seguir haciendo ciudad. Abrir los usos de estos equipamientos y edificios históricos a las personas más jóvenes nos permite explicar nuestra historia y mantenerla viva.

La apuesta de esta legislatura ha sido un urbanismo sostenible, participativo, de las cosas pequeñas, como le gusta decir a nuestro Consejero y responsable Pablo Muñoz. Un urbanismo que defiende el modelo de ciudad compacta que hace posible la proximidad de servicios y relaciones. Un Urbanismo que ha venido para quedarse.

Y en este marco, se han conseguido desbloquear en los últimos días dos proyectos fundamentales para la ciudad. El primero de ellos, la urbanización de los suelos del Portillo, al retirar el ente gestor de infraestructuras ADIF, del Ministerio de Fomento, el contencioso que mantenía en los tribunales. De esta forma, se da vía libre a la reparcelación de este entorno, tan demandado, de forma que podremos dibujar los nuevos usos que le damos a esta zona. El otro proyecto que acaba de desbloquearse es la prolongación de la Avenida Tenor Fleta, cuyas obras empezarán en el mes de abril.

Pero hay más, tenemos en marcha nuevas construcciones: como el nuevo parque de Bomberos de Casetas, reformas en numerosas instalaciones deportivas, el centro cívico de Rosales del Canal o la cúpula escénica en el Parque de la Granja. Son infraestructuras incluidas, muchas de ellas, en los Planes de Barrio que ya estamos haciendo realidad. Hoy, San José y las Fuentes han visto la luz; enseguida Delicias y luego Valdefierro y Torrero. Una estrategia exitosa ya puesta en marcha en muchas otras ciudades como Barcelona o Madrid pero que se había resistido en Zaragoza.  Se trata de intervenir desde una visión integradora, favoreciendo en muchos casos trayectos urbanos, verdes, amables; se trata de darle futuro a unos barrios (el eje este-oeste) que quedaron desacoplados de las bonanzas de la Expo y del tranvía.

En todos los barrios de la ciudad se han recuperado espacios vacíos, más de 60 solares, zonas de juego, aparcamientos, zonas verdes y pequeños huertos urbanos. Y se han completado muchas infraestructuras pendientes desde hace muchos años, como la Calle Oviedo o Antonio Leyva. Una obra esencial para la ciudad como la Avenida de Cataluña la podemos ver ya recuperada en varios de sus tramos.

En este modelo urbanístico, basado en la cercanía y en la cohesión social, la mejora de la instalaciones deportivas ha jugado un papel fundamental. Hemos hecho posible una mayor integración con el apoyo al deporte base. En ese sentido, se ha hecho un gran esfuerzo para que los campos deportivos tuvieran instalaciones dignas y para que su gestión esté a cargo de los propios clubes. Hemos trabajado para aumentar el atractivo de las instalaciones de acuerdo a los hábitos deportivos y recreativos de la población y para mejorar su eficiencia social y medioambiental.

Voy a darles algunas cifras: la reforma del Centro Deportivo Municipal Gran Vía, conocido popularmente como la Hípica, ya adjudicada, cuesta un millón doscientos mil euros. Colocar césped artificial en los campos de fútbol, dos millones doscientos mil. El nuevo estadio de la Unión Deportiva Casetas, un millón de euros. Y, con el Real Zaragoza, firmamos, por fin, un acuerdo, de ochocientos mil euros, que incluía apoyo al deporte base y la financiación de mejoras, largamente demandadas por los aficionados, en La Romareda, la casa del zaragocismo que este mismo año celebra su sexagésimo aniversario. Un acuerdo beneficioso para el club, la afición y la ciudad en su conjunto y que da cumplimiento a la resolución aprobada por unanimidad en el pasado debate del estado de la ciudad.

Cuentas públicas

Para hacer posible todas estas mejoras, aplicamos desde el primer momento una política económica muy clara: reducir gastos superfluos y acabar con las deudas de las prestaciones de los servicios que alcanzaban los cincuenta y cinco millones de euros. El transporte público, la limpieza o las instalaciones deportivas están ya bien cubiertas presupuestariamente.

Los servicios se prestan de forma ordenada y no se acumulan deudas como ocurría en años anteriores. En todos los presupuestos que se han aplicado desde 2016 se han dotado con suficiencia los servicios para evitar que se generarán más deudas.

Al margen de la necesidad expresada en múltiples ocasiones de una reforma constitucional sobre las competencias de los Ayuntamientos para una financiación justa de los mismos, no les voy a repetir cifras que ya hemos contado a lo largo de estos cuatro años, pero sí insistiré en una idea clara: hemos aplicado un sistema impositivo justo y equilibrado que nos ha permitido bonificar tasas e impuestos a las rentas más bajas y subirlas a quienes más tienen.

Este 2018 es el tercer año consecutivo que hemos congelado el IBI para el 99% de los zaragozanos. Hemos aumentado, también este año, hasta un 95% las bonificaciones para los recibos del agua y basura para familias cuyos ingresos no superen en 1,2 veces el salario mínimo interprofesional.

Según datos de la Agencia Tributaria, en Zaragoza había en 2018, ciento ochenta y tres mil declarantes de menos de mil euros al mes, a los que hay que sumar los no obligados a declarar por pocos ingresos. En esa situación, es de justicia repartir, compensar y apoyar a quien menos tiene y a quien sostiene de verdad la economía de la ciudad: asalariados, PYMES y autónomos. Porque en eso consiste el principio de redistribución y solidaridad social sobre el que se levanta el edificio del Estado Social.

En este sentido, el saneamiento de las cuentas públicas era una de las necesidades más imperiosas para aplicar políticas sociales y proyectos de sostenibilidad. La deuda se ha reducido en más de cien millones de euros.  En junio de 2015 estaba en ochocientos cincuenta y seis millones de euros y la previsión es terminar el año con seiscientos setenta y cuatro millones de euros.

Hemos salido del plan de ajuste cinco años antes de lo previsto, se han pagado cien millones de euros en sentencias judiciales firmes y se ha reducido el pago medio a proveedores más de treinta días. En junio de 2015 se pagaban con un retraso de sesenta días, hoy quienes tienen facturas con el Ayuntamiento las cobran a veintiocho días.

Gracias a ello hemos podido acceder a créditos para invertir más en la ciudad (veinticuatro millones de euros) y dedicar parte del remanente a inversiones financieramente sostenibles. El esfuerzo inversor ha sido el más alto en los últimos años, del 5%. La inversión por habitante se ha incrementado en el último año y se ha situado en más de cincuenta y cuatro euros por persona. Queremos seguir invirtiendo en esta ciudad y mejorando la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas.

La defensa de los servicios públicos sigue siendo una guía de nuestra acción  a la hora de gestionar esta ciudad. La atención telefónica a través del 010, tras la sentencia firme del orden laboral, puede ser ya considerada un servicio público. Las profesionales que lo atienden cobran puntualmente sus nóminas y han podido conservar su empleo. El ahorro de ciento veinte mil euros anuales, como consecuencia de la remunicipalización, irá destinado a mejorar el servicio y las condiciones laborales de las trabajadoras. Por el momento, ya se ha instalado un servicio de atención a personas sordas.

Zaragoza es Cultura

Zaragoza es cultura, y Zaragoza tiene genio para dar a conocer esa cultura. El modelo que el equipo liderado por el Concejal Fernando Rivarés ha implantado es el que concibe el acceso a la cultura como un derecho universal, igual que la sanidad o la educación, que tiene en cuenta la autogestión ciudadana y artística y que impulsa proyectos participativos , sostenibles, transformadores, y basados en el talento local.

Les pongo algunos ejemplos de este modelo que algunas ciudades Europeas como Toulouse o Varsovia han pedido importar y que hemos dado a conocer en Cádiz, Madrid, Córdoba, Pamplona o Valencia:

Barrios Creando, Creando Barrios;         una apuesta por acercar en los barrios la cultura a colectivos en riesgo de exclusión social, a través del teatro comunitario, la danza inclusiva o el circo social.

El Espacio Nexo; un foro estable de reflexión en torno a las culturas comunitarias y su relación con ámbitos como el urbanismo, la economía, la ecología, la tecnología o el feminismo, entre otros.         

El Festival Zirco que nos ha convertido en la segunda ciudad española más importante         en esta dinámica y el Internacional de artes escénicas ZGZEscena         cogestionado con las asociaciones profesionales de artes escénicas.

El nuevo centro de danza, centro de producción y formación con 11 residencias artísticas.

Residencias artísticas que se han puesto en marcha también en el Auditorio (dos orquestas sinfónicas) y en el espacio Harinera en San José.

En total 30 proyectos artísticos que se pueden desarrollar en espacios públicos y que impulsamos para que salgan adelante.

Este modelo ha consolidado el espacio Harinera en San José, experiencia pionera en España de gestión comunitaria, a través del colectivo “Llámalo H”. Experiencia presentada hasta la fecha en más de 20 ciudades de todo el territorio nacional.

También hemos conseguido la cesión del antiguo Instituto Luis Buñuel al colectivo que lo ocupaba, reconociendo su valor como centro social comunitario.

Este modelo cultural ha ayudado también a transformar socialmente a través del arte urbano, barrios como Oliver. Y en este modelo cultural caben también las Fiestas del Pilar que por cuarto año consecutivo han sido un éxito de participación, y que han recibido un notable alto en la valoración. Todo un festival de festivales en la calle, con artistas de calidad, la mayoría aragoneses, programación para todos los públicos, que emocionan a todos los que nos visitan.

Apostando por la cultura transformadora, cooperativa y transversal nos estamos convirtiendo en una metrópolis cultural europea. Lo cual también contribuye a la mejora de los datos turísticos: casi un millón de visitantes hemos tenido en 2018, con más pernoctaciones que han superado los datos del 2008, y nos está abriendo nuevos campos en Gran Bretaña e Italia.

La Participación como eje transversal

La mejora de la calidad democrática de nuestras instituciones a través de la incorporación de procesos democráticos participativos son una demanda social en nuestro país. Por eso hemos sentado las bases con varias ciudades como Madrid, Barcelona y por supuesto Zaragoza a través de diversos instrumentos, entre los que destacan los presupuestos participativos. Podremos perfeccionar el modelo, con mejoras administrativas y formación tecnológica, pero no hay marcha atrás. Casi el cien por cien de los proyectos de la primera edición se han ejecutado, y hasta finales de 2019 se estarán ejecutando propuestas escogidas por la ciudadanía, también de los barrios rurales, de la segunda edición. En total diez millones de euros. Se puede afirmar con rotundidad que ninguna otra ciudad española que haya puesto en marcha este proceso ha alcanzado un grado de ejecución similar. El trabajo de la concejala Elena Giner y su equipo ha sido meritorio.

No sólo en los presupuestos se han aplicado procesos participativos. Escuchar a la ciudadanía, entidades vecinales y colectivos sociales para que puedan ser decisivos en la transformación urbana ha sido una constante. Consultas, jornadas, encuentros con asociaciones de vecinos y comerciantes, redes sociales y nuevas tecnologías han sido solo algunos de los mecanismos utilizados para que se tenga en cuenta lo que de verdad quiere la ciudad y los barrios desde proyectos a escala de ciudad (la ampliación del Parque Pignatelli  o el Mercado Central) hasta actuaciones que solo afectan a los barrios.

Pero la transformación democrática que significa la participación ciudadana la hemos aplicado en muchos otros aspectos. El Consejo de Cultura, que aglutina a diecisiete mesas sectoriales, y el grupo de trabajo de Las Fiestas del Pilar. En todos estos ámbitos se han tomado decisiones importantes como aprobar subvenciones, planes y proyectos de desarrollo o estrategias de ciudad.

En este proceso de mejorar la democracia participativa es imprescindible la transparencia. Actualmente somos de los Ayuntamientos con mejores prácticas en datos Abiertos y Transparencia de España. En datos abiertos, y según el “Ránking de Open Data España” Zaragoza obtiene la 3ª máxima puntuación de las ciudades de toda España. En Aragón el Ayuntamiento de Zaragoza es el  más transparente con diferencia por delante de Huesca y Teruel.

La ciudadanía nos exige más. Y estamos en ellos, con más inversión en personal y tecnología haremos más accesible y comprensible la información.

Quiero señalar también que este Alcalde y todos los concejales y concejalas del Gobierno hemos rendido cuentas ante los vecinos y vecinas en varias ocasiones durante estos tres años, a través del programa Desde Los Barrios y Un café con el Alcalde.

La Zaragoza de los valores

Estamos profundamente orgullosos de haber conseguido, junto a cerca de 60 entidades sociales de la ciudad, tejer una Alianza Antirumores para trabajar por la convivencia, frente a los estereotipos racistas y xenófobos.

Asociaciones de personas migrantes, gitanas, juveniles, de consumidores y vecinales, partidos políticos, sindicatos, colegios profesionales y organizaciones que trabajan en ámbitos como la intervención social, la salud, la educación y la cooperación al desarrollo hemos adquirido un fuerte un compromiso: coordinar nuestras fuerzas y construir una barrera de defensa para nuestra ciudad, ante el auge de la xenofobia y el discurso del odio que avanza en toda Europa.

En este contexto, no quiero olvidar la lección que nos dio la sociedad zaragozana ante el anuncio de la llegada de personas refugiadas, una respuesta de solidaridad y cariño. Como Ayuntamiento, hemos estado en aquellas redes, cumbres y declaraciones más importantes para articular una respuesta internacional y local ante esta gran crisis humanitaria.

El Ayuntamiento ha hecho una gran inversión mediante subvenciones de cooperación al desarrollo destinadas a los campos de refugiados, hemos puesto a disposición alojamientos dignos en nuestra ciudad, creado una mesa permanente de recursos para garantizar la cobertura de las necesidades básicas y el asesoramiento jurídico necesario para estas personas. Y podemos decir que estamos preparados para actuar ante la llegada de más población refugiada en caso de emergencia: contamos con medio centenar de plazas en los alojamientos municipales.

La cooperación es uno de los valores de la sociedad Zaragozana, y también de este Ayuntamiento.

Memoria democrática

Decía mi buen amigo Carlos Slepoy, abogado de las víctimas de la dictadura argentina, la chilena, la guatemalteca y la española , que el obstáculo para juzgar el franquismo en España no es judicial, sino político. Desde las instituciones no solo estamos obligados a cumplir con la Ley de Memoria Histórica, debemos ser capaces de transmitir los valores de la memoria democrática, recuperar los testimonios olvidados, hacer justicia y luchar por su reparación.

Zaragoza forma parte de la red de ciudades contra la impunidad franquista. No es solo un título o un trabajo en línea que se desarrolle con otros municipios. Es un compromiso moral y ético con los familiares de las víctimas, con las personas que ya no están, y con la sociedad del futuro.

Trabajamos junto a la Universidad de Zaragoza en un programa de investigación y difusión de la memoria histórica de la ciudad, documentando y recuperando testimonio orales para construir una ruta de la memoria por toda la ciudad. La oficina de atención a víctimas del franquismo trabaja en esa misma dirección, con la vista puesta en recopilar los suficientes datos que nos permitan armar una querella por los crímenes contra la humanidad que cometió el franquismo. Quiero agradecer el apoyo y el voto afirmativo de Chunta Aragonesista para llevar a cabo esta y otras acciones.

Hemos eliminado los símbolos franquistas de una de las entradas a la ciudad: el puente de Santiago. Zaragoza honra la memoria de las Trece Rosas con un lugar para su recuerdo en el Parque José Antonio Labordeta y, en esta misma plaza, colocamos una placa conmemorativa como homenaje a los ediles y los 30 funcionarios asesinados por los sublevados.

Junto a otras instituciones hemos colaborado en la memoria de las personas fusiladas por el régimen. Junto al Gobierno de Navarra, recordamos, en el cementerio de Torrero, a los más de 200 navarros alistados en el Tercio de Sanjurjo, fueron fusilados en los primeros meses del golpe militar de 1936 en Zaragoza y enterrados en nuestro cementerio.

NO SE VAYAN TODAVÍA… AÚN HAY MÁS

Acabo aquí con la mirada larga a los resultados más relevantes de nuestra acción de gobierno. La cita electoral no supone un punto y aparte en la vida de la ciudad, ni mucho menos, en la gestión de este gobierno.

Solo quienes viven encerrados en las cuatro paredes de este Salón de Plenos y creen que la ciudad se circunscribe a lo que sucede aquí dentro piensan en términos exclusivamente de legislatura.  Decía Winston Churchill “El político se convierte en estadista cuando comienza a pensar en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones”.  Se ha echado en falta en esta Corporación bastante de esa visión de Estado, o de ciudad en nuestro caso.

Un gobierno responsable no puede funcionar en clave exclusivamente electoral. Bien al contrario debe tener una visión a largo plazo, consciente de que los cambios importantes para la ciudad requieren de mucho más tiempo que los cuatro años de duración del mandato de la Corporación Municipal.

De ahí que nos planteemos seguir impulsando acciones y políticas que vayan más allá de ese 26 de mayo de 2019. No solo es nuestra responsabilidad como Gobierno sino que además estamos convencidos que los vecinos y vecinas de Zaragoza apoyarán mayoritariamente estas propuestas con su voto en las urnas.

Revolucionando la movilidad en el centro de Zaragoza

Vamos a poner en marcha un ambicioso proceso de transformación de la movilidad en el centro de la ciudad, con la finalidad de lograr la pacificación del tráfico rodado, de una forma más o menos intensa, en el espacio incluido dentro del segundo cinturón de Zaragoza.

Plan Casco Histórico a Cota Cero

En primer lugar, vamos a impulsar el Plan Casco Histórico a Cota Cero en esta zona de la ciudad para pacificar el tráfico y hacerla más accesible a los peatones.

El espacio que originalmente ocupaba la Caesaraugusta romana hace dos mil años sigue siendo hoy una vía principal  de nuestra ciudad  donde se concentra gran parte de la actividad comercial, turística y cultural.  

En línea con lo que hacen en otras ciudades de nuestro entorno, desarrollaremos  una ambicioso plan de elevación de la calzada a cota 0 posibilitando el acceso rodado a residentes, transporte público, emergencias y carga y descarga.

Las experiencias piloto de las calles Espoz y Mina y Don Jaime, han resultado tremendamente exitosas de cara a favorecer la accesibilidad universal y la movilidad peatonal.

Consideramos necesario por tanto continuar con el proceso y pacificar el tráfico rodado en las calles interiores al Coso que podría extenderse a los entornos de San Pablo, la Magdalena o San Miguel. Es por ello por lo que pretendemos que los próximos años, de manera progresiva para minimizar las molestias a vecinos y comerciantes de la zona, vamos a acometer este proceso que hará del Casco Histórico un gran espacio de disfrute peatonal.

Centro de Zaragoza: Zona de Bajas Emisiones

En segundo lugar queremos convertir el espacio interior al segundo cinturón, el Centro de Zaragoza, en una Zona de Bajas Emisiones, en la línea diseñada por la propuesta de Plan de Movilidad Urbana Sostenible.

El PMUS, que va a quedar aprobado durante esta legislatura, prevé articular la movilidad en la ciudad para el año 2027 a través del establecimiento de un sistema de restricciones al tráfico. Se limitará el acceso de vehículos a los diferentes anillos de la ciudad, en función de su tipología, usos y grado de contaminación.

Para cumplir con este objetivo debemos comenzar ya a dar pasos en esa dirección.

Por ello, proponemos que en el próximo mandato se ponga en marcha lo previsto por el PMUS para el primer y segundo cinturón de Zaragoza en línea de lo que están haciendo otras grandes ciudades del Estado, Europa y resto del mundo y con la política de transición ecológica que impulsa el actual Gobierno Central,

Para ello articularemos un sistema de restricción del tráfico que dará prioridad a los vehículos de residentes, servicios y aquellos que cuenten con etiquetas Cero o Eco, estableciendo normas específicas para la carga y descarga en la zona.

Más planificación urbana estratégica y participativa

Queremos, también, seguir potenciando la planificación urbana participativa de largo plazo, a partir de las semillas plantadas esta legislatura.

Estrategia Zaragoza+20

En el seno de Ebrópolis, tras más de un año de trabajo, estamos en disposición de presentar durante el primer trimestre del año que viene la Estrategia Zaragoza+20. El objetivo no es otro que planificar estratégicamente las líneas que nos permitan ser una ciudad sostenible, innovadora y para los ciudadanos.

Para ello se está ultimando el cuarto pacto estratégico de la ciudad, que debe permitirnos tener una nueva visión compartida y de amplio consenso de Zaragoza y de su articulación con el entorno. Afrontamos con ello un cambio de paradigma importante de sostenibilidad y lucha contra el cambio climático, dando continuidad al mismo tiempo al enfoque de ciudad que cuida de las personas, posibilita una calidad de vida equitativa y las pone como protagonistas, todo ello sin dejar de apostar por el conocimiento y la innovación.

Plan Especial para la Huerta de Las Fuentes         

Tras el desarrollo de los planes de barrio de San José, Las Fuentes y Delicias durante este último año, se hace necesario continuar con el resto de la ciudad. Se trata de una herramienta de planificación participativa a 10 años vista que pretendemos se extienda a todos los barrios de la ciudad hasta el año 2021.

Uno de los primeros resultados de esta iniciativa es el desarrollo de un  Plan Especial para Las Fuentes y su Huerta, considerado como prioritario por los vecinos de ese distrito.

El plan tendrá como objetivo convertir la huerta en una parte activa en la dinamización del barrio. Para ello se multiplicarán las conexiones de las huertas con el barrio a través de la Ronda Hispanidad, se mejorará la red de caminos existente y la accesibilidad desde la carretera de Castellón.

Pretendemos, en línea con las políticas desarrolladas durante este mandato, potenciar la producción hortícola ecológica o de cercanía, promoviendo la sustitución de otros cultivos, para entrar a formar parte de la oferta de producto fresco local.

A diferencia de otros proyectos anteriores este Plan Especial no contempla construcción de vivienda sino por el contrario la potenciación del tejido productivo y la creación de servicios para el barrio.

Ello será posible gracias también a la creación de un parque agrario y al aumento de la concentración de usos y equipamientos en el entorno destinados tanto a cubrir las necesidades deportivas y sociales del barrio, como a la transformación de los productos que se obtengan de la huerta.

Rehabilitación de vivienda

La implementación del Plan de Inversión en Vivienda 2018-2023  a través de la financiación del Banco Europeo de Inversiones va a focalizar las políticas de vivienda del próximo mandato corporativo, por la movilización de 72 millones de euros para la promoción de 308 viviendas y la rehabilitación de otras 842.

A lo que se añadirá la rehabilitación de viviendas en el ámbito privado. Tras haber multiplicado por más de 5 los recursos dedicados a estas actuaciones en lo que va de mandato, consideramos necesario continuar en la senda emprendida, fijándonos como objetivo que podamos alcanzar los 10 millones de euros anuales en 2023.

Por una Zaragoza más cuidadora

Seguimos trabajando por facilitar la vida a nuestros vecinos y vecinas y por el cuidado de todas, especialmente de los sectores más vulnerables.

Ayudas sociales a través de la Tarjeta Ciudadana

En materia de derechos sociales, desde el próximo mes de enero el Ayuntamiento de Zaragoza va a prestar la gestión de sus ayudas a través de la Tarjeta Ciudadana.

Fruto del trabajo conjunto de las Áreas de Participación y Derechos Sociales, esta innovación supone un paso importantísimo en la dirección de la normalización en la prestación de estas ayudas. De esta forma se permitirá a sus beneficiarios que puedan elegir el comercio, de entre los adheridos al programa, donde hacer efectiva la ayuda.

Esta iniciativa supone una gran mejora en términos de adaptabilidad a las necesidades concretas de los perceptores de las ayudas. Pero también un avance importantísimo de cara a la mejora de la cohesión social, evitando el aislamiento a través de la inclusión del pequeño comercio en la iniciativa. Además sus posibilidades de crecimiento son enormes en cuanto a agilización de procesos y disminución de trámites burocráticos en la gestión de subvenciones y exenciones.

Plan para el cuidado de nuestros mayores

Un problema que empieza a cobrar una magnitud ciertamente preocupante es el elevado número de personas mayores que viven solas, algo que me consta ha sido objeto de debate en este mismo Salón de Plenos.

Por eso quiero anunciar que este Gobierno trabaja en la elaboración de un Plan de Cuidado de nuestros Mayores.

El mismo incluirá que en un plazo máximo de tres años se lleve a cabo la universalización del Servicio de Teleasistencia. Nuestro objetivo es que todos los mayores de 75-80 años que vivan solos o que tengan una persona dependiente a su cargo puedan acceder a disfrutar de este servicio.

Aspiramos además a que en los próximos años haya implantados en todos los barrios Proyectos de redes comunitarias de cuidado y acompañamiento a nuestros mayores. El objetivo no es otro que fomentar el trabajo conjunto de los servicios municipales, entidades sociales y vecinos con el objetivo de acompañar a nuestros mayores en situación de soledad no deseada.

Proyecto piloto de uso y dinamización de patios escolares

Otro de los sectores más vulnerables al que queremos prestar una mayor atención en los próximos años son niños y jóvenes.

Queremos para ello impulsar, todavía con más ahínco, la estrategía Zaragoza Ciudad Educadora. Para ello procederemos a revisar el Modelo de Escuelas Infantiles, para dar respuesta a las necesidades de nuestros barrios, potenciando al máximo la educación como herramienta de transformación social.

En el primer semestre del año, vamos a poner en marcha dos proyectos piloto de uso y dinamización de patios escolares en barrios. Se trata de buscar soluciones imaginativas en relación con la escasez existente de espacios públicos destinados a la infancia en ciertas partes de la ciudad. Delicias será el primer barrio que participará en este proyecto piloto y pronto estaremos en condiciones de anunciar cuál será el segundo barrio que se sumará a la iniciativa.

La intención es extender el plan al resto de barrios durante la próxima legislatura, una vez evaluados los proyectos pilotos que esperamos sean un rotundo éxito.

Más deporte base

Seguimos comprometidos con fomentar el acceso al deporte como un derecho universal. En la línea de la promoción del deporte base es nuestra intención lograr el objetivo de que todos los campos de fútbol municipales sean de césped artificial en el próximo mandato.

Para ello ampliaremos la operación de renovación de césped a los campos de Montañana, Peñaflor y Movera, los cuales se añadirán a los de Santa Isabel, Fleta, San José y segunda fase del campo de fútbol San Miguel en Casetas que pronto serán una realidad.

Más y mejor cultura

En materia cultural tenemos preparado un ambicioso paquete de medidas que tienen en común seguir profundizando en el modelo de Cultura del Bien Común.

En relación al objetivo de lograr ser referentes a nivel estatal en cuanto a programación cultural, aprovechando el 25 aniversario de la construcción del Auditorio de Zaragoza, vamos a impulsar un ambicioso proyecto de mejora de su programación, la cual a pesar de tener un nivel de excelencia altísima, debe seguir creciendo en calidad.

Aspiramos a que la cultura se viva intensamente en las calles, plazas, parques y, en general, espacios públicos de nuestra ciudad. Por ello vamos a poner en marcha un Proyecto de teatro clásico en los parques públicos de la ciudad, que se complementará con un nuevo Plan de recuperación de arte en la calle con la escuela de Restauración de Aragón.

El fomento del talento local y su proyección internacional no puede faltar tampoco en este pack de medidas. Para ello nos proponemos también realizar 8 coproducciones de danza y teatro con 8 compañías locales que trabajaran con 8 estructuras internacionales de países europeos como Italia, Alemania y Francia.

En materia de mejora de las infraestructuras culturales de la ciudad  vamos a abordar un nuevo Plan de recuperación del patrimonio de Caesaraugusta que vendrá acompañado también de la renovación museográfica y tecnológica de los museos de la Zaragoza romana.

Zaragoza, ciudad de valores

Respecto a la memoria histórica quiero destacar la pronta apertura de la Casa de la Memoria Histórica Democrática en Torrero, como sede de las asociaciones memorialistas y que va a impulsar el desarrollo de actividades en esta materia a través de un modelo de cogestión.

Respecto a la eliminación de vestigios franquistas en nuestra ciudad, en cuanto conozcamos el resultado del estudio encargado al Departamento de Historia Contemporánea de la Universidad de Zaragoza procederemos a su sustitución por otras que homenajearan a relevantes mujeres con el objetivo añadido de feminizar nuestro callejero y reducir la gran brecha existente entre denominaciones masculinas y femeninas que existe en este momento. Seguimos apostando, de esta forma, en feminizar nuestra acción política, mejorando para ello la visibilización de la mujer en todos los aspectos posibles de la vida pública.

Cierre y despedida

Seguimos demostrando que hoy es posible mirar al futuro con optimismo.  Necesitamos esa fuerza de la voluntad a la que el pensador Antonio Gramsci oponía el pesimismo de la razón. Pero sobretodo, condiciones materiales para afrontarlo con garantías.

Y hoy podemos decir que los zaragozanos y zaragozanas están en mejores condiciones de afrontar lo que el futuro depare que cuando fui investido alcalde.

Hay muchas cosas por hacer, muchos retos que afrontar, numerosas limitaciones e impedimentos que dificultan el avance, pero a pesar de todo, el modelo de ciudad que apuesta por la transformación y el cambio se está imponiendo día a día.

Con nuestras diferencias, matices y, en algunas ocasiones, algaradas, las fuerzas progresistas lo hemos impulsado con bastante éxito, haciendo posible la mejora de la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas. Porque es una evidencia que hoy Zaragoza, en líneas generales, está mejor que en junio de 2015.

Podría estar mejor, eso es cierto. Pero también mucho peor. Así sería, sin duda alguna, con un gobierno del Partido Popular. Y así lo han entendido Partido Socialista y Chunta Aragonesista, quienes no han hecho caso a los cantos de sirena que les llegaban desde la bancada de la derecha y diversos medios de comunicación, más ocupados en generar un falso relato de ciudad en medio del caos que en hacer propuestas en beneficio de todos.

Este es el último Debate del Estado de la Ciudad de este mandato corporativo. Pero que sea el último no implica que este haya acabado. Quedan 6 meses hasta las elecciones de mayo y quedan muchas cosas por hacer, bastantes por finalizar y un buen número de ellas por seguir impulsando.

El 26 de mayo nos someteremos al escrutinio de nuestros vecinos y vecinas que elegirán sus nuevos representantes en este Salón de Plenos. Pero, por encima de todo, decidirán qué modelo de ciudad quieren que se aplique en el próximo mandato. Otorgando la mayoría a una bancada u otra decidirá si el Ayuntamiento sigue apostando por el cambio y transformación, o por el retroceso y la vuelta al pasado.

Tengo el firme convencimiento que los zaragozanos y zaragozanas revalidarán esta apuesta, por lo que tendremos como responsabilidad compartida de la izquierda dar cumplimiento al deseo de los ciudadanos.

Lógicamente aspiramos a seguir liderando el gobierno y finalizar la tarea iniciada hace tres años y medio. Una vez demostrado que se pueden cambiar las cosas. Que podemos mirar al futuro con esperanza, ilusión y optimismo. Es lo que se espera de nosotros.

En un contexto político de desazón, de crecimiento de las posiciones de ultraderecha, las más reaccionarias, intransigentes y retrógadas, el cambio de Gobierno tras la moción de censura ha insuflado esperanza entre todos aquellos que compartimos una visión de progreso de la sociedad. Ello nos obliga a tener la suficiente altura de miras, una vez desenmascaradas algunas formaciones que se vendían como regeneracionistas.

Debemos ser conscientes que nos estamos jugando como sociedad nuestra propia convivencia, el pleno ejercicio de derechos y libertades, el proyecto de relación fraternal y pacífica entre los pueblos que debiera representar Europa, en definitiva nuestro propio ser.

Es por ello por lo que debemos, como representantes públicos, y en especial, aquellos sobre los que recae la responsabilidad de haber impulsado la mejora de las condiciones de vida de nuestros vecinos y vecinas, tanto en el pasado como actualmente, dar ejemplo y mirar más allá, mirar a largo plazo, con visión de ciudad.

En este sentido quiero cerrar con una cita de Pepe Mujica, expresidente de Uruguay:

La política está sujeta a volar como las perdices, cortito y rápido. Y se está necesitando política de largo aliento en un mundo que se globaliza.

Muchas gracias a todos y todas.

Se suspende la sesión hasta las 4:30 horas.

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