Zaragoza, viernes 10 de diciembre de 2021.- El grupo municipal de Zaragoza en Común en el Ayuntamiento de Zaragoza ha pedido al gobierno de la ciudad que lleve a cabo una campaña formativa y de divulgación dirigida a menores que promueva el respeto al derecho a la  orientación sexual e identidad o expresión de género y  prevengan  las agresiones y actitudes discriminatorias por esta causa. La formación ha solicitado estos recursos tras las agresiones contra el colectivo LGTBQI que se han producido en las últimas semanas en la ciudad de Zaragoza, así como los discursos de odio hacia este colectivo.

Además, ha solicitado que se establezcan cauces de colaboración con Gobierno de Aragón y Delegación de Gobierno para la prevención de los delitos de odio por razones de orientación sexual e identidad o expresión de género, así como posibilitar el  acceso a la  justicia restaurativa en el tratamiento de los mismos.

El pasado puente de la Constitución se produjo en nuestra ciudad una agresión de carácter homófobo en una zona en la que se encuentran varios bares a los que acude el colectivo LGTBI. Un suceso “que no es anecdótico”, ha defendido el portavoz de la formación, Pedro Santisteve, que también ha alertado de que “desde hace un tiempo muchas personas sienten en su día a día un incremento de las agresiones por su orientación sexual que van desde los insultos verbales, la marginación, la exclusión y la discriminación,  a las agresiones físicas”.

Los datos del Ministerio del Interior señalan que las infracciones y delitos relacionados con la discriminación por orientación sexual o identidad de género aumentaron un 10% en 2019 con respecto a 2018. Pasando de 259 a 283 y constituyendo uno de los grupos donde los delitos de odio se han incrementado más.

De la misma manera la Oficina contra la Discriminación del Gobierno de Aragón, señala que en la Comunidad Autónoma hasta finales de septiembre había atendido 17 consultas sobre hechos relacionados con la discriminación gran parte de ellos vinculados con agresiones homófobas.

Ambos datos, como inciden todas las personas expertas en el tema, no son representativos de la realidad dado que cifra sumergida de delitos de odio es mucho mayor dado que por miedo, por vergüenza o por desconfianza hacia las instituciones muchas personas no dan a conocer las agresiones que sufren.

“Lo que vemos, pues, no es sino la punta del iceberg de una situación que se va agravando al amparo de los discursos intolerantes que minimizan y normalizan la discriminación, uno de cuyos ejemplos más recientes lo podemos encontrar en el intento del partido de la ultraderecha de  derogar leyes antidiscriminación aprobadas en la Asamblea de Madrid con amplio consenso con la connivencia, o el silencio complice del Partido Popular”, ha concluido Santisteve.

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