Soy Lorena, tengo 36 años, vivo en el distrito Universidad con mis dos #inadoptables y soy bisexual. Trabajo en uno de los sectores más precarizados (telemarketing) donde además ejerzo como delegada sindical desde 2021, mientras lo compatibilizo con estudios universitarios y el trabajo de fines de semana en un pub. Desde los 18 años llevo formando parte de distintas organizaciones sociales y sindicales y no he dejado nunca de movilizarme, siempre he dicho que voy “de mani en mani y sigo porque me explotan”. Forman parte de mi identidad el movimiento transfeminista, la defensa de los servicios públicos y de calidad, la justicia social y la recuperación de la memoria democrática.
Avanzo, junto a mis compañeras, con las que sé que Zaragoza puede volver a ser una ciudad más amable, que no niegue los derechos sociales ni silencie las manifestaciones políticas. Que cuide el medioambiente y salga del bucle de recortes municipalistas en los que la derecha nos ha metido. El auge de la extrema derecha y sus discursos de odio son reales, como lgbtiq+ vivo la discriminación en mi propia ciudad como una constante. Creo en la diversidad, en el trabajo en equipo y en lo común. En la movilización y la escucha. Creo que no hay patriotismo más puro que aquel que desea que su tierra esté libre de injusticias.