El grupo municipal de Zaragoza en Común en el Ayuntamiento de Zaragoza ha criticado las “precarias condiciones” en las que se presta el ‘Servicio de Orientación para mujeres y otras personas con dificultades para el empleo por razones de género’ que se presta desde una empresa externa por valor de 140.000 euros al año.
El servicio, que salió en noviembre de la Casa de la Mujer (donde llevaba casi dos décadas), ya no cuenta con la sinergias que se generaban al tener toda la atención en un mismo espacio, los pliegos han precarizado las condiciones de trabajo y de prestación del servicio, lo que ha provocado el abandono de la totalidad de la plantilla que realizaba esas funciones -de los cinco trabajadores/as ya no queda ninguno- y el gobierno “ha abandonado completamente el seguimiento de las condiciones del servicio”, que no cumple con los requisitos de accesibilidad ni de privacidad en la atención.
Según conversaciones con los profesionales que llevaban más de 10 años trabajando, han decidido abandonarlo por las malas condiciones, no sólo laborales -ya los contratos se refieren a una categoría inferior al trabajo realizado-, con un empeoramiento sustancial, sino por la calidad del servicio que se presta.
Además, desde Zaragoza en Común han señalado la eliminación de la figura del psicólogo que consideran “imprescindible” en un servicio de inserción laboral. También han criticado que se deriven las personas víctimas de violencia de género, cuya atención corresponde a este servicio al IMEFEZ.
En cuanto a las condiciones de accesibilidad, el espacio dispone de varias barreras arquitectónicas que hacen imposible la atención de personas que utilicen silla de ruedas. Esto sucede a pesar de que en el proyecto que presentó la entidad y por el cuál ganó el concurso explicitaba que “todos nuestros centros de actividad (incluido el que desarrollará el servicio de Información y Orientación laboral para mujeres y otras personas con dificultades en el acceso y mantenimiento del empleo por razones de género) son accesibles en todos sus espacios. Se ajustan a los requerimientos funcionales y dimensionales que permiten su utilización de manera autónoma, con independencia de que tengan limitadas determinadas capacidades y permiten a la persona desenvolverse con facilidad”.
Zaragoza en Común también ha señalado que, a pesar de que las personas usuarias tienen que aportar información personal confidencial, en el local apenas caben las mesas donde los y las profesionales realizan la atención, de manera que la intimidad de las conversaciones no se cumple, dándose esta situación con el resto de usuarias y profesionales de programas que desarrolla la entidad y que no están vinculados al servicio municipal.
Por esta razón, la formación duda de que ese espacio sea para el uso exclusivo de los profesionales del servicio, algo que también está recogido en los pliegos.
Fue en noviembre del año pasado cuando se licitó el Servicio de Orientación para Mujeres y otras personas con dificultades para el empleo por razones de género, una licitación de un año más tres prórrogas que obtuvo YMCA por una cuantía de 140.000 euros anuales (560.000 euros en total). “Se trata de una cantidad de dinero público lo suficientemente importante como para garantizar que este servicio, un servicio municipal, se preste con la mayor calidad posible y con el cumplimiento riguroso de lo establecido en el pliego”, ha señalado Domínguez.
ZEC duda de la “exclusividad” del servicio
Zaragoza en Común también ha preguntado a la responsable del área de Acción Social sobre si los tres profesionales que prestan atención en el servicio están dedicados en exclusiva al mismo.
“Según las conversaciones que hemos mantenido con personas usuarias y trabajadoras, mucho nos tememos que esté siendo justo al revés, que sean precisamente las personas contratadas en exclusividad las que estén utilizando su jornada para desarrollar otro tipo de programas de la entidad”, ha señalado Domínguez.
También ha pedido aclarar que ese espacio sea para el uso exclusivo de los profesionales del servicio, condición recogida en los pliegos.
Estos señalan: «El adjudicatario no podrá destinar la zona de trabajo/atención aportada para este proyecto a usos distintos a los del cumplimiento de este contrato». Ya les digo que esto no está siendo así, máxime cuando por ejemplo en casos extremos se requiere un espacio con mayor intimidad se les remite a uno de los espacios que comparten con otras actividades e incluso en ocasiones no está disponible.
Dudas sobre la protección de datos
La formación también ha preguntado si se está cumpliendo con la Ley de Protección de datos.
Los pliegos establecen que los datos no pueden ser objeto de cesión, difusión, publicación o utilización para finalidades diferentes de las que se establecen en el presente pliego.
Sin embargo, un correo del servicio contenía una campaña para realizar aportaciones vía Bizum a la entidad gestora.
“La responsabilidad no se acaba cuando se licitan unos pliegos, al contrario, es el momento en que el control y supervisión municipal debe ser mayor”, ha concluido Domínguez.