Piden al gobierno de Natalia Chueca y a la consejera de medio ambiente Tatiana Gaudés que realicen los controles necesarios para garantizar que la salud de los vecinos y vecinas de Zaragoza, del propio río y de la fauna y flora no se ponga en peligro
Zaragoza en Común ha advertido a lo largo de este último año la necesidad de controlar los vertidos de industrias situadas tanto de dentro de la ciudad como de las instaladas en polígonos industriales
El grupo municipal de Zaragoza en Común en el Ayuntamiento de Zaragoza ha pedido al gobierno del PP en el Ayuntamiento de Zaragoza que tome las medidas necesarias para garantizar que el río Gállego no se vea afectado por los vertidos de la fábrica de papel La Montañanesa, como han denunciado recientemente la entidad ecologista ANSAR.
A través de la entidad, se ha tenido conocimiento de que en el tramo urbano del barrio de Montañana y a lo largo de 6 km del cauce del Gállego, desde el punto de vertido hasta la desembocadura en el Ebro, su caudal se ha teñido de aguas provenientes de la fábrica.
Zaragoza en Común ha denunciado que este impacto en el río, así como en su flora y fauna, “no es un episodio aislado” ya que es una situación que se produce “con frecuencia”, hasta el punto de que en Google Maps se puede detectar una mancha de color marrón oscuro de varios kilómetros río abajo y que se observa con más intensidad en los meses de verano, cuando el caudal del río es menor.
Desde la formación, han solicitado al gobierno de Natalia Chueca y a la consejera de medio ambiente Tatiana Gaudés que tomen los controles necesarios para garantizar que la salud de los vecinos y vecinas de Zaragoza, del propio río y de la fauna y flora no se ponga en peligro.
Zaragoza en Común ha denunciado que, sin conocer los componentes del actual vertido, el teñido de las aguas, tal y como advierten las entidades ecologistas, limita la filtración de la luz, pudiendo causar afecciones a la biodiversidad.
Aunque la fábrica cuenta con autorización de vertido directo al Gállego por parte de la CHE, razón por la que sus vertidos no llegan a la red de saneamiento municipal, el Ayuntamiento de Zaragoza tiene competencias en materia de conservación de los ríos en el tramo urbano, como es el barrio de Montaña. Por esta razón, es imprescindible que solicite a la CHE los informes de vertidos de la citada fábrica y que el propio Ayuntamiento recoja muestras del cauce y se observe sus posibles afecciones y se tomen las medidas necesarias para evitarlas.
La depuración industrial, un grave problema de la ciudad
Zaragoza en Común ha destacado cómo, durante todo el último año, han sido varias las ocasiones en las que desde el grupo municipal se ha advertido al gobierno de las posibles afecciones tanto de salud como económicas en las arcas municipales derivadas de las deficiencias en la depuración industrial de las empresas. Una situación que se produce en aquellas industrias situadas tanto de dentro de la ciudad como de las instaladas en polígonos industriales; Tereos en el barrio del Picarral o Industrias Químicas del Ebro en Malpica.
“Ambas vierten sus aguas a la red municipal y ambas han generado problemas en esta a lo largo de los últimos meses”, ha recordado la portavoz de ZEC, Elena Tomás.
Este año, los vecinos del barrio del Picarral denunciaron la acumulación de residuos en sus calles, al salir de las alcantarillas una espesa espuma y malos olores provenientes de estas mismas en aquellas viviendas más cercanas a la planta.
En el caso de Industrias Químicas del Ebro, la composición de los vertidos de la fábrica ha provocado daños en la depuradora de la Cartuja y ha obligado al incremento del uso de nanocoagulantes con el fin de disminuir la turbidez, lo que ha incrementado los costes de la depuración y superar los límites de fósforo establecidos, como han recogido los últimos informes de la CHE.
Desde Zaragoza en Común han pedido que el Ayuntamiento cumpla la normativa municipal en el ámbito de los vertidos y del cuidado al medio ambiente. Además, consideran importante controlar y exigir a las empresas el cumplimiento de la exigencias en materias de vertidos, porque “no puede ser que las empresas obtengan beneficios a costa de no hacer las inversiones necesarias y sean además los vecinos y vecinas los que paguen con su salud este coste”, ha detallado Elena Tomás.
Desde Zaragoza en Común también apremian al gobierno a dar solución a la actual situación de las empresas FCC y AVANZA, situadas en la carretera Castellón, que actualmente no cuentan con red de saneamiento y vierten al escorredero de Fillas en la A-68. La formación también ha pedido verificar si FCC ha realizado las inversiones reales necesarias en las depuradoras de pequeño tamaño que la multinacional se comprometió a instalar en su nave de Carretera de Castellón, algo de lo que el grupo municipal asegura no tener constancia.
Por último, la edil de la formación ha pedido que, en estos casos de vertido directo al río en los que no pasa por una planta depuradora, se lleve a cabo un control más exhaustivo por parte de la CHE y también desde las instancias municipales, debido a la gravedad de las consecuencias sobre el medioambiente y la salud de los y las vecinas.